Manotas
Todavía no entiendo cómo pude trabajar tantos años como cajero de banco. Y fueron más de seis. Imagino la corbata y ya me pica el cuello. Ha...
Todavía no entiendo cómo pude trabajar tantos años como cajero de banco. Y fueron más de seis. Imagino la corbata y ya me pica el cuello. Ha...