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Beckam, Pitt, Clonney, Lobito y 500 colombianas en una fiesta.

La Lobita y yo estamos en Cartagena haciĂ©ndole seguimiento al evento anual de una empresa de belleza. Grabar videos y crear conceptos para un paĂ­s tan inmenso y distinto como Colombia es cosa seria, asĂ­ que decidimos comprar nuestros pasajes y venir a supervisar y ver en quĂ© podĂ­amos ayudar, asegurĂ¡ndonos de que todo salga de las mil maravillas.

Tres dĂ­as de supervisiĂ³n en Cartagena y mañana partimos a BogotĂ¡ a testear otro vĂ­deo que tenemos en proyecto y que es vital que cale en el alma de las bellĂ­simas colombianas que hemos descubierto a la orilla de este tibio y paradisĂ­aco mar.

Nuestro cliente estuvo feliz con la propuesta de hacer en vivo y en directo la supervisiĂ³n (y no desde Lima como fue lo acordado) y se ofreciĂ³ muy amablemente (PERO MUY AMABLEMENTE) a alojarnos la semana que estaremos aquĂ­.



Es por eso que escribo este post desde una preciosa habitaciĂ³n (cortesĂ­a de nuestro querido cliente) con terraza y vista a un precioso y delicioso mar. Nada mĂ¡s y nada menos que el hotel del papi de Paris: el Hilton de Cartagena.

Han sido días de trabajo intenso ajustando detalles y ordenando algunos desbarajustes producto de la "creatividad a distancia", también hubieron una o dos escapaditas a la playa (el paraíso) y a la ciudad y al fin hoy fue la cena de clausura: 500 mujeres bellísimas en pleno bailongo con orquesta y todo.

La salsa y sus variantes (cada cual menos bailable para mĂ­) nunca ha sido mi fuerte. Eso es algo q me tenĂ­a sin cuidado, ya que a lado de la Lobita estaba a salvo de las 500 colombianas (no exagero, esa es la cantidad exacta que la empresa ha alojado aquĂ­) Ă¡vidas de encontrar una pareja de baile entre los 4 varoniles y tan poco bailarines disponibles que, por leyes de oferta y demanda, nos convertimos en David Beckam, Brad Pitt, Leonardo di Caprio y George Clooney (para servirlas).

Pero como no todo es color de rosa en la capital de las idem: la Loba, agotada por el trabajo de estos dĂ­as (y porque mañana salimos al aeropuerto de madrugada) cayĂ³ agotada a la mitad de la cena, antes del baile, dejĂ¡ndome como hijo al que le ponen a Michael Jackson de niñera.

De buena gana la hubiera acompañado (hubiera huido) a la habitaciĂ³n si es que no me encomendaba la tan trascendental tarea de convencer a nuestra anfitriona de que el vuelo a BogotĂ¡ de mañana saliera un poco mĂ¡s tarde.

Y ahĂ­ estaba yo sentado, tratando de pasar piola mientras el piso retumbaba con los saltos y los caderazos de tan prĂ³digas mujeres, vestidas y maquilladas para matar.

Y ahĂ­ estaban mis otros congĂ©neres (Brad, Leo y George) con carita de ratones asustados cada vez que una de estas señoritas apretaban sus escurridos cuerpos en smoking contra sus prĂ³digos pechos forrados en lentejuelas.

Yo ahí, hundiéndome debajo de las flores del centro de mesa, intentando pasar desapercibido en pleno merengue.

Ellas ahĂ­, en fila y moviĂ©ndose como una sola, acercĂ¡ndoseme lascivas, perfumadas y tropicalmente sandungueras: medio millar de mujeres divirtiĂ©ndose solas, en un hotel cinco estrellas, a la orilla del mar mĂ¡s maravilloso de sudamĂ©rica y sin mĂ¡s hombres disponibles que nosotros cuatro.

Dicen que hay cosas que son inevitables. Hay que estar preparado psicolĂ³gicamente y dejar que pase, prepararse para lo inevitable y sonreĂ­r como si uno tuviera el dominio de la situaciĂ³n.

Totalmente falso: Uno no domina nada y es como cuando a uno lo revuelca una ola:

No sabes dĂ³nde es arriba, todo lo ves verde, intentas nadar hacia lo que imaginas es la superficie pero resulta que tocas el suelo. Crees que ya saliste y respiras agua salada. Al final, confundido, sales con los labios salados, las piernas temblando y la sensaciĂ³n de que eres una brizna de hierba a merced del poder (y voluptuosidad) de los elementos.

Pero eso sĂ­, sonriendo de la verguenza.

Yo sonreĂ­a, eso sĂ­, pero no de verguenza sino de agotamiento, horror a la salsa y al merengue y sobre todo a esa desnuda sensaciĂ³n de ser un pollo a la brasa en pleno comedor popular producida por los mil ojos con sus pestañas que lo miran a uno.

Definitivamente no estoy preparado para eso.

Un caderazo mĂ¡s y lloro. Una mĂ¡s que me toma de las manos y confunde una de Bisbal con Lambada y grito. Otra mĂ¡s que me quiere ver hacer piruetas enredando sus brazos y haciendo giros y le digo que sufro de osteoporosis y lepra.

En uno de esos pasos de garabato (se supone debo girar como trompito a merced de los bronceados-humectados-escarchados-perfumados brazos) me escabullo bajo el mar de sirenas que me rodean y luchan por darme una cĂ¡tedra de ritmo colombiano (Definitivamente era mĂ¡s una pulsiĂ³n hormonal que didĂ¡ctica)

Mientras gateo debajo de la mesa veo a algunas que se dieron cuenta de mi escape y sonrientes pegan la carrera con ese dejo cantarĂ­n que no oigo por los decibeles de la mĂºsica. La desesperaciĂ³n es la madre de todos los magos, asĂ­ que cuando logran levantar el mantel ya estoy por la consola de sonido haciĂ©ndome el que reviso algĂºn desperfecto con el personal tĂ©cnico.

Llego a la puerta, inmensa como el de un castillo que debe ser resguardado. Tal vez sea asĂ­ de grande para aislar la acĂºstica, tal vez en verdad es el castillo de los sueños de mi adolescencia. Lo siento, Lobito adolescente, los sueños sueños son. AĂºn no estoy preparado para eso.

Con el rabillo del ojo observo a mis amigos David, Brad y Leo mirĂ¡ndome en shock, girando, girando, rebotando cual pepas en corbata michi al ritmo de un vallenato. Con un gesto les deseo suerte y huyo a los ascensores.

Las puertas automĂ¡ticas se cierran detrĂ¡s de mĂ­ y a lo lejos se oye el fragor de una batalla.

12 comentarios

Herr Hauptmann dijo...

Jajajaja! , eso se llama "presentar batalla en inferioridad de condiciones". AdemĂ¡s estabas acompañado pues, ni modo.

Rose dijo...

Ja, jaja George Clooney, ta bien ah? Yo conozco varios que acompanhados y todo no hubieran "resistido" jajaja
que bueno que mi lobito es fiel, bueno y no sabe bailar merengue....
un besito ....No te confundieron con Carlos VIves????

AnĂ³nimo dijo...

¿500 top models y tu fuiste con tu pareja?

a eso se le llama ser invitado a un banquete y llevar tortas...
(o sea, como la torta de jamon del chavo del ocho)

pero bueno... supongo que tu chava te lo habrĂ¡ apreciado.

AnĂ³nimo dijo...

Miras las noticias, Ă©l estĂ¡s presionando tan. deseo que me demostrarĂ­an algo hacerme sonrisa de vez en cuando.

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Hola Lobo.
¿QuĂ© mas cuentas despuĂ©s de tal suceso?

:)

acerca de "Babel": aĂºn no la he visto...

*


¿QuĂ© pasarĂ­a con los otros varones?

abrumadoras féminas, eh...

AnĂ³nimo dijo...

a t e n c i o n :

EL FALSO PROFETA NECESITA DE SU AYUDA EN MEXICO, TU LE DEBES UN FAVOR EN AQUEL EPISODIO DE LOS NAZIS MEXICANOS AHORA EL FALSO ESTA SIENDO BLANCO DE ATAQUES VE ESTO:

HTTP://FALSOMANDRIL.BLOGSPOT.COM

AnĂ³nimo dijo...

a t e n c i o n :

EL FALSO PROFETA NECESITA DE SU AYUDA EN MEXICO, TU LE DEBES UN FAVOR EN AQUEL EPISODIO DE LOS NAZIS MEXICANOS AHORA EL FALSO ESTA SIENDO BLANCO DE ATAQUES VE ESTO:

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Waldo Dominguez dijo...

Hey Lobo Lobo
te quedaste en colombia?

AnĂ³nimo dijo...

asi pasa cuando sucede... nadie esta libre.. jejejee

AnĂ³nimo dijo...

Y porque diablos no le pasa algo asĂ­ a un soltero hambriento de 500 mujeres colombianas curvilineas !!!

vidente dijo...

Mostro el paisaje !lindas las chicas ?? yo te dejarĂ­a que bailes con todas ! jaja

AnĂ³nimo dijo...
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