Ayer Gustavo trajo un lechon entero y me pidio que lo preparara.
Franz me ayudo a descuartizarlo. Linda labor de fin de año.
Hasta ahora no me puedo quitar el olor de la sangre de las manos.
Y todavia falta verlo en la mesa.
POR DIOS!
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4 comentarios
HIJIIIITOOOO laaavate las manos je je jeeeee
que nervioooossss
gustavo y sus locuras...podrias escribir un libro. O mejor no, no torturemos a la gente.
besos
ke ricooo
Estuve esta noche vagando por los blog de mi familia, mirando la panza de Rosita, leyendo tus blog y tu pagina web (buen material, lo leeré con calma)
Me alegra poder por lo menos mirarlos a través de esta pequeña ventana y ver como ahora son unos padres cariñosos.
Recibe muchos besos y mis mejores deseos para que las metas que tienes pautadas este año se lleguen a cumplir...Cariños, Mirella
¡bon appétit!
mmmhhh, yom, yom... con lo riquisimas que son las carnitas de puerco. Lograste que se me hiciera agua la boca.
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